No.
A
este lado tampoco hay vacaciones.
Nuestro
Colegio profesional, al menos en su sede de Barcelona, no hace
vacaciones.
Yo,
tampoco.
Y
así puedo hacerte llegar este Boletín Informativo
del mes de Julio.
Para
comenzar: no hubo juicio.
El
24 de Julio nuestro Colegio tenía que personarse en los
juzgados por el despido improcedente de una empleada del COPC
que quiso decir algo en una de las Juntas Extraordinarias y
no se le dejó. Y, luego, de manera un tanto burda, fue
despedida en los siguientes días.
Pues
bien, esa ex-empleada demandó a nuestro Colegio por despido
improcedente y el día 24 de este mes era la fecha de
la vista. Pero no hubo. Parece que se llegó a un acuerdo.
Dicen que de varios miles de euros.
Miles
de euros que, además de la minuta legal correspondiente,
se va a pagar con el dinero de todos los colegiados y colegiadas
y eso simplemente para subsanar una chapucera actuación
de alguna mente lúcida pero quizá algo prepotente.
Sólo quizás.
Esto
que te cuento es algo que me han contado pero que, por supuesto,
preguntaré directamente a nuestra Junta de Gobierno en
la próxima Junta de Colegiados, donde tienen la sagrada
obligación de dar explicaciones a cualquier colegiado
y colegiada. Así que, como es evidente que les llegan
estos mensajes, supongo que tendrán tiempo de preparar
una respuesta clara y concreta sobre cuánto nos ha costado
exactamente ese despido improcedente. Y, de paso, también
podremos saber, si consideran oportuno responder, lo que han
costado algunas contrataciones y despidos algo extraños
que se han producido en el área de Comunicación-Prensa
de nuestro Colegio.
Más
cosas.
En
la última Junta General de Colegiados y Colegiadas había
varios puntos por aprobar y, como ya te conté, se aprobaron
los que procedían y se obviaron los que no tenían
sentido.
Por
lo que tengo entendido, el segundo punto del orden del día,
que trataba de autorizar un gasto extraordinario de casi 600.000
euros no se aprobó.
Bueno,
se aprobó pero, parece que sin ser legal la aprobación.
No
te lo puedo asegurar porque para ello necesitaría que
me hubieran dejado ver el Acta de esa Junta General y aún
estoy esperando que me dejen consultarlas (sigo pidiéndolas
por escrito sin que se dignen a cumplir con su obligación
de ponerlas a mi alcance, pero eso es otro tema más serio).
Eso
de que se aprobó sin que pudiera aprobarse es simple,
aunque es un pequeño rollo legal que quizá te
aburra.
Pero
te lo cuento.
Según
nuestros vigentes Estatutos, para aprobar un gasto extraordinario
o para ganar una moción de censura se necesitan dos tercios
de los votos de los presentes en la Junta General. Según
mis datos, no salen. Pero tengo que esperar a ejercer mi derecho
a consultar ese Acta (que debería ser pública)
para poderlo afirmar y presentar el consiguiente recurso de
impugnación de dicha aprobación.
Si
es como yo apunto, nuestra Junta de Gobierno y su magnífica
asesora legal patinaron bastante al no tener en cuenta las normas
que rigen nuestro gobierno colegial.
Aunque
eso, ¡qué triste!, ya no me sorprende.
Y
voy acabando…
En
Febrero de 2007 ya solicité que me enviaran copia de
las Actas de las Juntas de Colegiados. Me dijeron que no enviaban
copia y que estaban a mi disposición.
En
Junio de 2008 solicité que me enviaran la trascripción
de la Junta Extraordinaria y… ¡sorpresa!, me enviaron
copia del Acta (algo que en Febrero de 2007 era imposible).
En
Junio de 2008 me presenté en la sede de Barcelona para
consultar las Actas, tal como me habían dicho que podía
hacer en el 2007, pero no me dejaron verlas porque tiene que
haber alguien de la Junta de Gobierno vigilando (no sé
bien la razón… pero bueno).
Así
pues, el 19 de Junio solicité, por escrito, que tuvieran
a bien indicarme un día y una hora para poder ejercer
el derecho a saber qué contenían esas Actas que
deberían de ser públicas y que tanto me está
costando poder consultar.
Hoy,
a punto de comenzar un mes que paraliza el universo occidental
conocido, aún no tengo acceso a esa información.
Mmmmm….
Sinceramente
no comprendo cómo, en un editorial de la Revista del
COPC, alguien en nombre de la Junta de Gobierno se atrevió
a escribir: "És
per això que oferim novament a tots aquells col•legiats
i col•legiades, tal com s’ha fet fins ara, la possibilitat
d’accedir a aquella informació necessària,
dins del marc estatutari i amb el respecte a la confidencialitat
i a la vigent llei de protecció de dades".
A
mí, que me lo expliquen.
Joaquín
Morata. Col. 6247