Por
primera vez en los años que llevo colegiado asistí
a la asamblea general. Era un mal día y una mala hora,
pero los mails de Joaquín me conectaron con el deber
profesional. Reconozco que iba de pardillo, creyéndome
que en una hora acabaríamos el tema y por primera vez,
habría ejercido mi derecho a voto. Soy de fuera de Barcelona,
y estoy limitado por los horarios del transporte público.
Como muy tarde podía coger el último tren que
pasa por Sants a las 23:30. Tiempo suficiente, creí.
La
asamblea general empezó más de media hora tarde,
con una asistencia discreta. Los minutos fueron pasando y la
gente que asistía, en cuentagotas se iba marchando. Lógico,
pensé, son horas intempestivas, la mayoría tenemos
familia y mañana es día laborable.
El
drama llegó cuando acercándonos a las 11 de la
noche, el señor degano Don Jaume Almenara empezó
a contarnos su vida y milagros sobre la gran familia que es
el COPC, y los comentarios españolistas que los pobrecitos
del COPC han tenido que aguantar de sus compañeros de
otras comunidades. El colmo fue cuando, hablando igual que un
político (es decir, hablar sin decir nada), se lamentó
de que un gran problema en el COPC es la gestión de la
comunicación.
Me
quedo con la sensación de que el problema no es la comunicación,
sino él, como lo era en sus clases en la facultad de
Psicología. Asistir a ellas era una pérdida de
tiempo como lo es asistir a la Asamblea General. El día
perfecto y la hora perfecta para que quedasen los 20 de siempre
para votar a favor de lo que el jefe mandase.
Muy
a pesar mío, me tuve que ir antes de que se votase la
aprobación o no de los presupuestos del 2008. O lo hacía
o me pasaba la noche al raso rodeado de gente "feliz"
por la victoria del Barça. Desconozco cuál ha
sido el resultado de las votaciones, pero lo puedo intuir.
Tal
como estan las cosas creo que pasará como con Franco.
Nos tendremos que esperar a que desaparezca para cambiar el
régimen, porque lo que es por votos... mientras no se
pueda delegar, o ejercer el voto electrónico, nos queda
Almenara y sus secuaces para tiempo. En el fondo hay un punto
de admiración en mí, y reconozco que se lo han
montado muuuy bien.
Y
tu, Joaquín? Esperaba enontrareme un Robin Hood grande
y fuerte ;-) Pero me quedé con que no eres más
que un grano en su culo, que les incomoda, pero que de momento,
y tal como se lo montan ellos, poco cambio se puede hacer. Deseo
estar equivocado en esto, y tengo la esperanza en que como grano
perseverante les acabes provocando un shock séptico.
Ni que sea con mi voto, yo seguiré aportando mi granito
de arena (o de pus) para también provocar el cambio.
He
necesitado verlo para creerlo, y os aseguro que estoy muy dolido
con lo que tenemos por junta de gobierno.
Y con lo realista que soy, ahí va mi predicción:
Hasta que no salte algún escándalo que afecte
directamente el bolsillo del colegiado y/o sus derechos para
ejercer la profesión, o haya suficiente masa crítica
de colegiados en contra de la actual junta para que las cosas
cambien, todo seguirá igual.
Ay,
cuánta decepción!
Saludos cordiales y adelante!
Xavier